domingo, 24 de julio de 2016

Los delegados de Sanders se rebelaron en el comité de normas tras no lograr la eliminación de los superdelegados

El cabreo por la resistencia del partido a eliminar todos los superdelegados, la decepción con la selección de Tim Kaine como compañero de fórmula de Hillary Clinton y, sobre todo, la filtración por parte de Wikileaks de emails del Comité Nacional Demócrata que revelan lo que ya sospechaban, que el órgano de gobierno del partido maniobró contra Bernie Sanders en las primarias, constituyeron el caldo de cultivo perfecto para una rebelión de los delegados de Sanders en la reunión del comité de normas de la convención demócrata.


Dave Weigel (The Washington Post) nos narra los hechos desde Philadelphia:


"El comité de normas, que típicamente aprueba el proceso de nominación del partido con poco debate, se convirtió en una desembocadura de esa frustración. Los partidarios de Sanders llegaron con planes para acabar con los superdelegados totalmente. El Plan B era hacer concesiones a los partidarios de Clinton y reducir el número de superdelegados o su poder de voto. El Plan C era conseguir votos suficientes para su enmienda para demandar un dictamen en minoría, que pudiera ser votado en la convención, con miles de periodistas observando.


"El primer plan fracasó, a pesar de las súplicas y protestas de los partidarios de Sanders que zigzaguearon el vestíbulo fuera de la sala de reuniones y corearon "¡No más superdelegados!" y "¡Abrid las puertas!" Dentro de la sala, un grupo más pequeño coreó "¡Vergüenza!" y "¡Estáis matando al partido!" mientras cada enmienda era rechazada.




""Si abandonamos esta sala con nuestras cabezas bajadas sin una decisión mayoritaria, afirmando el status quo, eso va a ser una declaración a los votantes de este país," dijo George Albro, un miembro del comité de normas, sindicalista y partidario de Sanders. "¿Queréis que salgamos divididos y darle a Trump la capacidad de decir que hemos tenido una convención antidemocrática?"


"Los partidarios de Clinton reclamaron unidad y rechazaron la idea de que las normas del partido privaran de derechos a nadie. El ex Congresista Barney Frank, un partidario de Clinton al que Sanders quiso echar del comité, lo presidió con ocasionales notas de sarcasmo.


""¡Escuchad a vuestros votantes!," gritó un partidario de Sanders en un momento.


""Oh, perdona, no le estaba escuchando," bromeó Frank.


"Otros partidarios de Clinton argumentaron que estaban mal preparados para decidir la suerte de los superdelegados o que los partidarios de Sanders, muchos de los cuales se volvieron activos en política debido a su campaña, no apreciaban el sistema.


""He visto a mujeres y hombres hispanos remontar la escalera para convertirse en superdelegados; he visto a afroamericanos  remontar la escalera," dijo la Congresista Sheila Jackson Lee, de Texas, una partidaria de Clinton. "Nunca hemos sesgado unas elecciones de ninguna manera."


"Más tarde, los partidarios de Sanders obtuvieron una victoria parcial: una nueva "comisión de reforma de unidad" que ataría a la mayoría de los superdelegados a los resultados de las primarias, aunque permitiendo votar libremente a los miembros del Congreso, los gobernadores y los líderes del partido, fue aprobada por 158 votos a favor y 6 en contra. Los partidarios de Sanders también ganaron más de 50 votos en sus enmiendas clave, suficientes para demandar una votación en la pista de la convención, lo que los delegados de Sanders pretenden hacer.


""Me siento como si hubiéramos perdido la votación, pero hubiéramos ganado el debate," dijo Diane Russell, una legisladora estatal de Maine que ha estado haciendo campaña para acabar con los superdelegados.



"En cierta forma, la selección de Kaine fue un escollo aún mayor. En entrevistas, una docena de delegados de Sanders dijeron unánimemente que no les entusiasmaba Kaine; algunos admitieron que no habían oído nunca nada de él.


""Creo que Kaine es un tío maravilloso, pero esta era una oportunidad de conectar con los progresistas, y la oportunidad se ha perdido," dijo Rod Halvorson, un delegado de Sanders de Minnesota.


"El sábado por la tarde, algunos partidarios de Sanders estaban explorando la posibilidad de presentar una alternativa a Kaine a la nominación. 'Enfermeras Nacionales Unidas,' uno de los primeros y mayores sindicatos que respaldaron a Sanders, sugirió que la política de Ohio Nina Turner, una de las más destacadas defensoras negras de Sanders, se presentara como alternativa a Kaine. Una vaga alianza llamada 'Red de Delegados de Bernie,' que sondeó a sus miembros y descubrió que el 88 por ciento se opone a Kaine, planeó celebrar una conferencia este domingo por la mañana.


""La indignación no solo es llameante, es ardiente," dijo Norman Solomon, un delegado de California y líder de la 'Red de Delegados de Bernie.' "Hubo una insurrección en el partido, muy superior a lo que esperaban todos. Parece que Hillary se ha complicado la vida diciendo, no solo a sus delegados sino a los progresistas, que no ha aprendido nada de esa insurrección.


"Los partidarios de Sanders que defendieron la selección de Kaine lo hicieron con indecisión y con la esperanza de que Clinton lo había escogido para movilizar a los votantes hispanos. (Kaine habla castellano con fluidez.)


""Hay otros senadores que hubieran sido de mayor ayuda a su campaña, sin duda, pero Tim es ahora el elegido, y necesitan concentrarse en maximizar sus fortalezas," dijo Benjamin Jealous, ex presidente de la NAACP. "Sus fortalezas solo se manifestarán si se concentran en movilizar el voto negro y el voto marrón."


"Pero ningún partidario de Sanders pudo encontrarle un lado bueno al asunto de los emails del Comité Nacional Demócrata. Durante los descansos de la reunión del comité de normas, hablaron sobre las últimas revelaciones de los emails, como que la presidenta del DNC Debbie Wasserman Schultz reaccionó al llamamiento de Sanders a su destitución diciendo que perdería la nominación de todos modos.


""Es descorazonador," dijo Raisa Donato, una partidaria de Sanders que lideró el grito de "beeeeeeee" para parodiar a las personas a las que etiquetó como "ovejas" por votar para salvar a los superdelegados. "Yo tenía mucha fe en nuestro partido, y eso ha sido cuestionado en la última semana."


"Robert Becker, quien dirigió la campaña de Sanders en Iowa, dijo que se sentía personalmente ofendido por uno de los emails filtrados.


""Habiendo dirigido antes grandes organizaciones, si mi jefe de finanzas me envía un email diciendo, 'Hey, ataquemos a un candidato por su religión,' mi respuesta no hubiera sido 'Amén,'" dijo Becker. "Eso es lo que más me molesta: la falta de profesionalidad y de decencia del DNC en esos emails, yendo en contra de Bernie."


"Jeff Weaver ('campaign manager' de Sanders), quien pasó la mayor parte del día intentando llegar a acuerdos sobre las enmiendas, dijo que los emails "confirmaban que Debbie Wasserman Schultz es realmente una figura divisiva en el partido en lugar de alguien que pueda unirlo contra Donald Trump."


"Trump estuvo intentando probar eso. "Los emails publicados por Wikileaks hoy son tan malos para Sanders que harán imposible que la apoye (a Hillary), salvo que él sea un fraude," tuiteó Trump el sábado por la tarde. Al mismo tiempo, los demócratas (de los dos bandos) del comité de normas argumentaron que no apoyar sus posiciones le daría la Presidencia a Trump.


""Estáis enviando un mensaje a todas las personas que vienen al Partido Demócrata, que dicen: 'Algo no va bien aquí,'" dijo John Little, un partidario de Sanders y miembro del comité de normas por Indiana. "Eso va a ayudar a Donald Trump.""


Anoche se supo que la presidenta del partido, Debbie Wasserman Schultz, no dará un discurso en la convención. Debe ser la primera vez que esto ocurre, y se hace para evitar que la mitad de los delegados monten contra ella un espectáculo televisado en directo.

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