Bernie y Hillary debatieron antes del Súper Mega Martes

Bernie y Hillary en un nuevo debate. (Foto: AP/Wilfredo Lee)

No fue una noche sencilla para Hillary Clinton, que ha entrado en una nueva fase de dudas después de su inesperada derrota en Michigan. La candidata favorita de la carrera presidencial demócrata tuvo que defenderse ante preguntas sobre la política comercial de EEUU, sus vínculos con Wall Street, su responsabilidad en lo ocurrido en Benghazi en 2012 y el éxito de su adversario Bernie Sanders con las bases demócratas.

"Esto es una maratón," dijo Clinton. "Y es una maratón que solo puede realizarla el tipo de campaña inclusiva que yo estoy haciendo, una campaña que llegue a todos."

"Por si no os habéis dado cuenta, yo no soy una política nata como mi marido o el Presidente Obama," dijo. "Tengo que hacerlo lo mejor que pueda, conseguir los resultados que pueda, marcar la diferencia en la vida de las personas, y esperar que la gente vea que estoy luchando por ellos."

Los moderadores preguntaron a Clinton si piensa retirarse de la carrera presidencial en caso de que la investigación de sus emails termine en una formulación de cargos en su contra.

"¡Oh, por Dios! Eso no va a ocurrir," respondió sorprendida por la incómoda pregunta. "Ni siquiera voy a responder a esa pregunta."

El Senador Sanders también se vio acorralado cuando salió a la palestra una entrevista de 1985 en la que el entonces alcalde de Burlington elogiaba el trabajo de Fidel Castro en Cuba.

"Si esos valores son la presión al pueblo, hacer desaparecer a la gente, encarcelar a la gente o incluso matar gente por expresar sus opiniones, por ejercer la libertad de expresión, ese no es el tipo de revolución de valores que yo quiero ver en ningún sitio," dijo Clinton.

"Cuba es, por supuesto, un país antidemocrático y autoritario, y espero que cuanto antes se vuelva democrático," respondió Sanders. "Pero por otra parte, sería equivocado no declarar que en Cuba han hecho algunos buenos avances en sanidad."

Clinton volvió a repartir carnets de buen y mal demócrata, cuestionando la lealtad de Sanders al partido del burro. "El Senador Sanders siempre está criticando a los dos Presidentes demócratas más recientes. Desearía que criticase, que se uniera a mí en criticar a George W. Bush, quien creo que arruinó la economía y creó las condiciones para la Gran Recesión," dijo la ex secretaria de Estado.

En el debate migratorio, al que Univision acostumbra a dedicar una atención desmedida, los dos candidatos apoyaron una vía para la legalización de inmigrantes ilegales, y coincidieron en su oposición a la deportación de niños inmigrantes.

"Ya tenemos una frontera segura. No hay necesidad de esa retórica y demagogia," dijo Clinton, a la que su rival está obligando a adoptar posturas cada vez más radicales.

Clinton criticó a Sanders por votar en contra de un proyecto migratorio hace una década y le acusó de complicidad con los Minutemen, los civiles estadounidenses que se dedican a vigilar la frontera. Sanders acusó a Clinton de estar mintiendo.

Preguntados sobre si consideran racista a Donald Trump, el candidato favorito de los republicanos y acaparador absoluto de la campaña, que defiende la construcción de un muro grande y guapo con una pequeña y preciosa puerta en la frontera, los dos evitaron responder. Clinton dijo que el lenguaje del constructor va en contra de los valores estadounidenses, y Sanders recordó que Trump puso en duda que Obama sea estadounidense de nacimiento.

¿Quién ganó el debate? Bernie tiene ventaja entre las opiniones que recogió The New York Times. El senador de 74 años, hace un año un completo desconocido y ahora un político con un electorado nacional propio, está generando una atmósfera en la que cada vez le resultará más difícil al partido dejarle fuera del ticket.

Vídeo: debate completo. Disfrutadlo porque es el último programado en el partido del burro hasta dentro de más de un mes.