Trump cerró ayer su gira post-electoral con un mitin yuuuge en la olvidada Mobile, Alabama. El Donald estrenó la nueva gorra que usará como Presidente y homenajeó al Senador Jeff Sessions, el futuro fiscal general que ha vuelto a situar a Alabama en el mapa cuando nadie lo esperaba, a Kellyanne Conway y a Hope Hicks, el gran descubrimiento femenino de la campaña. Y por supuesto, Trump volvió a burlarse de Evan McMullin, la superestrella de los mítines post-electorales Trumpianos.
Mucho escuchamos en estos días sobre el colegio electoral y alientos de defecciones de los electores republicanos para parar a Trump (incluyendo un patético vídeo de Martin Sheen y sus amigos).
Y hasta este minuto todos los casos de "faithless electors" han afectado a... Hillary Clinton. Realmente el partido demócrata y los medios no saben donde están parados.
¡Y han votado a Colin Powell!, al que llamaban mentiroso por su actuación en el consejo de seguridad de la ONU.
Definitivamente, Trump les ha hecho perder los estribos.
Estaba claro que esa maniobra no tendría éxito porque los antecedentes hsitóricos indican que los electores (especialmente los del ganador) suelen ser muy leales y la ventaja de Trump fue muy cómoda en votos electroales.
Más deberían preocuparle las maniobras de una facción de la comunidad de Inteligencia, que en público se manifiesta a través de un sector de los medios y algunos clanes del Partido Demócrata, que en las últimas dos semanas ha intentado con lo del hackeo ruso crear el contexto para facilitar un golpe. Probablemente es la facción que se sintió más amenazada con la victoria de Trump y preocupada con amagos como el pizzagate. Veremos si Trump se atreve a atacarlos y exponerlos o a someterlos o simplemente los calma.
Para seguir la votación del Colegio Electoral: http://www.nytimes.com/interactive/2016/12/19/us/elections/electoral-college-results.html
Trump cerró ayer su gira post-electoral con un mitin yuuuge en la olvidada Mobile, Alabama. El Donald estrenó la nueva gorra que usará como Presidente y homenajeó al Senador Jeff Sessions, el futuro fiscal general que ha vuelto a situar a Alabama en el mapa cuando nadie lo esperaba, a Kellyanne Conway y a Hope Hicks, el gran descubrimiento femenino de la campaña. Y por supuesto, Trump volvió a burlarse de Evan McMullin, la superestrella de los mítines post-electorales Trumpianos.
ResponderEliminarMucho escuchamos en estos días sobre el colegio electoral y alientos de defecciones de los electores republicanos para parar a Trump (incluyendo un patético vídeo de Martin Sheen y sus amigos).
ResponderEliminarY hasta este minuto todos los casos de "faithless electors" han afectado a... Hillary Clinton. Realmente el partido demócrata y los medios no saben donde están parados.
¡Y han votado a Colin Powell!, al que llamaban mentiroso por su actuación en el consejo de seguridad de la ONU.
ResponderEliminarDefinitivamente, Trump les ha hecho perder los estribos.
Estaba claro que esa maniobra no tendría éxito porque los antecedentes hsitóricos indican que los electores (especialmente los del ganador) suelen ser muy leales y la ventaja de Trump fue muy cómoda en votos electroales.
Más deberían preocuparle las maniobras de una facción de la comunidad de Inteligencia, que en público se manifiesta a través de un sector de los medios y algunos clanes del Partido Demócrata, que en las últimas dos semanas ha intentado con lo del hackeo ruso crear el contexto para facilitar un golpe. Probablemente es la facción que se sintió más amenazada con la victoria de Trump y preocupada con amagos como el pizzagate. Veremos si Trump se atreve a atacarlos y exponerlos o a someterlos o simplemente los calma.
Para seguir la votación del Colegio Electoral: http://www.nytimes.com/interactive/2016/12/19/us/elections/electoral-college-results.html