domingo, 14 de febrero de 2016

Presidenciables en los talk-shows domingueros (III): Marco en cinco canales

Senador Marco Rubio (R-Florida) en State of the Union (CNN), This Week (ABC), Face the Nation (CBS), Meet the Press (NBC) y Fox News Sunday: está muy claro que el Senado no procederá con un nominado para sustituir al Juez Scalia ahora. Mitch McConnell fue muy claro anoche. Habrá unas elecciones en noviembre y vamos a tener un debate sobre el tipo de juez que debe sustituir al Juez Scalia y los votantes decidirán. El patrón de mentiras de Ted Cruz es alarmante. Solo en la última semana, ha mentido sobre mi postura acerca del matrimonio, ha mentido sobre mi historial sobre 'Planned Parenthood,' ha mentido sobre Ben Carson en Iowa, y tampoco está diciendo la verdad en inmigración. Cruz no tiene ni idea de lo que dije en castellano en Univision, simplemente dice lo que otras personas le están diciendo y es falso. El 11-S ocurrió por la decisión de Bill Clinton de no eliminar a Osama Bin Laden. No siento antipatía por Chris Christie, he intentado contactar con él.










2 comentarios:

  1. Pobre Marco, el anteultimo debate fue su momento WHERE`S THE BEEF? que podría costarle su campaña y no le veo recuperación. Lo cierto es que después de SC probablemente Carson se baje. Hay que ver como sale Rubio y Bush. Yo creo que ganará el Donald y un segundo lugar de Cruz lo animaría a Ted a seguir. En este escenario creo que Kasich buscará aguantar hasta Marzo -porque sabe que en el sur no pescará nada ya de antemano- y Jeb buscará una larga guerra de desgaste con Marco, dinero no le falta para ser la 3era opción después del SuperMartes. DanielArg

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  2. Rubio está bien situado. Es el que más consenso genera de los candidatos que quedan en liza. Su problema es que necesita que Jeb y Kasich desaparezcan para poder crecer lo suficiente. Lo normal es que antes de la primaria de Florida (15 de marzo) solo quede uno entre Rubio y Jeb. Si es Rubio el que queda, Trump lo tendrá más difícil. Si es Jeb el que queda, Trump lo tendrá más fácil.

    Pero Trump tendrá que pasar por esa prueba. Demostrar que cuando la competición se reduzca a solo dos personas, tres como mucho, puede seguir ganando primarias. Esa es la gran duda con Trump.

    La mejor aliada de Trump puede ser la cabezonería de Bush. Si Bush va a fracasar, para él es mucho más cómodo decir que fracasó proque estaba TRump, un fenómeno imprevisto, contra el que nadie pudo hacer nada, que tener que decir que fue humillado por Rubio. Egoístamente, a Bush, y sobre todo a sus asesores, puede interesarle más que la nominación la gane Trump antes que Rubio. Perder contra Rubio le señalaría a él como grna perdedor; perder contra Trump señalaría al ala gobernante del partido en general.

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