(Foto: AP) |
"No nos equivoquemos: la decisión de Jeb Bush (R) de recortar drásticamente la nómina de su campaña y reorientar sus esfuerzos hacia New Hampshire es un importante revés para quien una vez fue el candidato presidencial favorito del Partido Republicano," escribe Josh Kraushaar en National Journal.
Bajo el título de "Por qué los ajustes en la campaña de Bush son tan alarmantes," Kraushaar enumera los cuatro principales problemas de la campaña del ex gobernador de Florida:
1. La estragia de la 'conmoción y asombro' se ha convertido en 'estupefacción e histeria.'
"Al principio de la temporada electoral, en las campañas presidenciales la cosa va de teorías. La campaña de Bush esperaba que la impresionante red recaudatoria de la familia, un exitoso historial de gobierno y unos credenciales de marca lo convirtieran en el claro gigante del establishment. Aparte de un sólido primer trimestre recaudatorio, nada de eso ha acontecido.
"Según el Wall Street Journal, solo el 25 por ciento de los principales donantes del ex Presidente Bush en las elecciones de 2004 ha donado a la campaña de Jeb. Muchos donantes muy ricos del establishment - contactad con Sheldon Adelson - han permanecido al margen en lugar de invertir en el favorito inicial.
"Presentarse apoyándose en su historial conservador como gobernador de Florida no ha sido especialmente eficaz porque les recuerda a los votantes que es una figura del pasado. Simplemente mirad el último anuncio del súper PAC de Jeb: incluye fotos en blanco y negro de un Jeb Bush más joven en el cargo. Eso está muy desconectado del ánimo del electorado republicano, que está furioso y busca candidatos no contaminados por una larga carrera en la política.
"Mientras tanto, el Senador Marco Rubio, también de Florida, aventaja a Bush ahora en la mayoría de encuestas nacionales y de los primeros estados, y es visto cada vez más como el candidato que puede emerger como el favorito del establishment sin alejar a las bases del Partido Republicano. Dada la agitación en la campaña de Bush y su estancamiento en las encuestas, más líderes del partido, donantes y votantes de centro-derecha se fijarán en Rubio en los días venideros."
2. El primer bombardeo de anuncios no está funcionando.
"Cuando el súper PAC de Bush empezó el bombardeo de anuncios en los primeros estados en septiembre, un operario de alto rango de la campaña de Bush dijo que sería justo sacar conclusiones de su eficacia en el plazo de un mes. Se ha cumplido ese plazo ahora, y la decisión de la campaña de hacer cambios nos dice todo lo que necesitamos saber sobre los resultados.
"Bush ha estado gastando más que sus rivales en televisión, y habitualmente eso se traduce en un impulso en las encuestas. Pero en Iowa, Bush está languideciendo en el quinto puesto con el 5 por ciento - empatado con Rand Paul - en la nueva encuesta de Des Moines Register/Bloomberg Politics. Una casi mayoría de los votantes republicanos de Iowa (47 por ciento) dice que las "relaciones familiares" de Bush son negativas en su percepción del candidato. En el crucial estado de New Hampshire, Bush tiene solo el 10 por ciento en la encuesta de Bloomberg/St. Anselm College - está en tercer lugar. En todas partes, su índice de favorabilidad no se ha movido mucho desde que entró en la carrera. Su argumento de que es el republicano más elegible se ha evaporado: su aceptación entre el electorado general está todavía en números rojos (33/49, en la media de The Huffington Post).
"Todo esto sugiere que Bush enfrenta retos fundamentales que serán difíciles de alterar con dinero, anuncios e incluso con una reorganización de la campaña. Su perfil político está gravemente desconectado del ánimo rabioso, desafecto y anti-Washington del electorado republicano ahora mismo. Podría ser el candidato adecuado en el momento inadecuado para los republicanos."
3. Los súper PACs no son tan súper, después de todo.
"Como el Gobernador de Wisconsin Scott Walker antes que él, Bush está descubriendo que las impresionantes cifras del súper PAC no significan mucho sin el dinero que llega directamente a la campaña para confirmar esas cantidades. Bush recaudó una cantidad sólida de 13.4 millones de dólares en el tercer trimestre recaudatorio, pero los ingresos menguantes no pueden sostener los inflados gastos de su campaña. Un recaudador de fondos de Bush declaró a National Journal que es probable que la recaudación en el cuarto trimestre recaudatorio sea menor que los 13.4 millones del tercer trimestre - de por sí menos todavía dado el acceso de Bush a la masiva red recaudatoria de su familia.
""No están recaudando directamente para la campaña. Ese es el problema fundamental," declaró en privado el recaudador. "Están haciendo recortes, reorganizándose para decidir adónde van a ir."
"En los tres meses que terminaron el 30 de septiembre, la campaña de Bush gastó 2.4 millones de dólares pagando a 133 empleados diferentes. Rubio, por contra, pagó a 44 individuos un total de 591,500 dólares, y el Senador Ted Cruz pagó a 36 personas un total de 563,000 dólares. La campaña de Bush también gastó 922,000 dólares en vuelos chárter - aunque la gran mayoría de eso fue en julio y principios de agosto, antes de que la campaña empezase a recortar los gastos para encajar con la recaudación menor de la esperada.
"Otra evidente señal de alarma en la recaudación de Bush: su rendimiento entre los pequeños donantes fue especialmente pobre. De los 13.4 millones recaudados en el tercer trimestre, solo 877,000 vinieron de personas que dieron menos de 200 dólares - una dolorosa medida de su apoyo entre las bases.
"Si vas a presentarte a una campaña nacional de primarias con una organización sin par, necesitas ver resultados más pronto que tarde."
4. Es New Hampshire o nada para Jeb.
"A pesar de todo el énfasis que puso el estratega del súper PAC de Bush, Mike Murphy, en los estados ricos en delegados de marzo en una entrevista a Bloomberg, la realidad es que si Bush lo hace mal en New Hampshire (y Iowa), su campaña estará en cuidados intensivos. "No estamos dorándole la píldora. New Hampshire es extremadamente importante, y estamos poniendo muchos recursos allí," dice un asesor de la campaña de Bush, minimizando el argumento de Murphy. De hecho, oficiales de la campaña dicen a Bloomberg que los recortes en el personal les permitirán reorientar sus esfuerzos hacia New Hampshire, cuyo electorado moderado debería estar hecho a la medida del mensaje reformista de Bush.
"Bush necesita emerger como el favorito del establishment - un carril que ahora mismo está excepcionalmente abarrotado, con Rubio, Carly Fiorina, el Gobernador de Ohio John Kasich y el Gobernador de New Jersey Chris Christie compitiendo por ese título. Si termina por encima de sus rivales del establishment en New Hampshire, se le verá como el 'Comeback Kid' que después será capaz de consolidar sus ganancias en los estados más grandes y caros que siguen. Pero si no puede superar a su paisano floridano (o a cualquier otro) en un estado que es obligatorio para él, el argumento a favor de su candidatura empezará a evaporarse."
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