(Foto: @FamousDC) |
Lindsey Graham ejerció de camarero por una noche. (Foto: @donmoyn) |
Lindsey Graham (R), que llegó ayer a Boulder, Colorado para participar hoy en el primero de los debates (el de los candidatos secundarios), se puso detrás de una barra de bar a servir cerveza y licor a los periodistas, activistas y consultores republicanos que han invadido la ciudad de la falda de las Montañas Rocosas.
Graham se sometió después a una entrevista con Dana Bash (CNN) titulada Politics on Tap que hace referencia a la cerveza de barril.
Bash le dio tres opciones: Hillary Clinton, Carly Fiorina y Sarah Palin. Graham tenía que elegir con cuál de ellas tendría una cita, se casaría o la haría desaparecer para siempre.
"Tómese su tiempo, senador," le dijo Bash.
Graham no dudó demasiado.
Tendría una cita con Sarah Palin, "iríamos a cazar en nuestra primera cita."
Se casaría con Carly Fiorina "porque es rica."
Bash le preguntó si haría desaparecer a Hillary.
"No, ¿pero es rica? Dijo que estaba completamente arruinada," respondió Graham.
El coronel en la reserva contó que nunca ha probado la marihuana, pero dijo que está a favor de su legalización para uso medicinal.
Graham se erigió en portavoz de los candidatos que no han conseguido clasificarse para el debate de los mayores y tendrán que conformarse con un debate de serie B de solo una hora.
"Creo que apesta," dijo Graham. "El concepto mismo es defectuoso. Con todo el respeto, sé que somos muchos los que nos presentamos, pero no creo que yo sea un candidato de segunda categoría cuando se trata de la seguridad nacional. Creo que tengo algo que ofrecer. Y las encuestas, en este momento, se basan en la fama y en las citas jugosas que dicen los candidatos. Si has tenido un programa de televisión, lo haces mejor en las encuestas que alguien que no ha tenido un programa de televisión."
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