¿Está Romney aguardando cautelosamente la desgracia de otros candidatos?

Sources tell @FoxBusiness that @MittRomney is keeping the door open for possible 2016 run more @MelissaAFrancis now
— Charles Gasparino (@CGasparino) February 6, 2015

"Mitt Romney está dejando la puerta muy abierta a una posible candidatura en 2016, según operarios republicanos," ha dicho el corresponsal Charlie Gasparino en el programa de Tom Sullivan en Fox Business, recoge Talking Points Memo.

Ha señalado lo que el ex gobernador de Massachusetts anda diciendo en los últimos días a algunos seguidores que se le acercan a preguntar.

"Esto es lo que está diciéndole a la gente: sean conscientes de la palabra 'improbable' que utilice en mi discurso de la semana pasada," ha dicho Gasparino. Se refiere a cuando Romney se limitó a decir que "parece improbable" que cambien las circunstancias que le llevaron a tomar la decisión de no presentarse.

Gasparino ha planteado la posibilidad de que Romney esté esperando a que las primarias republicanas conduzcan a una convención abierta en la que surjan nuevos nombres.

Sobre una convención abierta ya teorizaron hace unos días en Hot Air, apuntando a que en 2016 será necesario tener una mayoría absoluta de delegados en al menos ocho estados para que tu nombre pueda ser sometido a votación en la convención. Hasta 2012, hacía falta tener solo una mayoría relativa en cinco estados y fue precisamente el equipo de Romney el que endureció la norma para evitar que Ron Paul pudiera presentar su candidatura en aquella convención.

"No hemos tenido una convención abierta desde... ¿desde Kennedy o algo así?" se ha burlado Sullivan al escuchar las conjeturas de Gasparino.

En realidad fue antes de Kennedy. La última convención verdaderamente abierta - que requirió más de una votación para que un candidato saliera elegido - fue la demócrata que nominó a Adlai Stevenson en 1952. Aunque en la práctica podemos considerar también una convención abierta la republicana de 1976, al no contar ningún candidato con los delegados necesarios en el momento de la apertura de la convención; y en menor medida, la demócrata de 1980.

Aunque si de verdad está dejando la puerta abierta, es más probable que Romney esté esperando a que en los primeros meses de 2016 se repitan los llamamientos del establishment republicano para que entre un nuevo candidato, como el famoso plan B por si Romney se estrellaba que vimos en febrero-marzo de 2012, cuando se temía por una victoria de Rick Santorum en Michigan y Ohio. En cualquier caso, no parece verosímil, teniendo en cuenta que esta vez en el pelotón de candidatos activos habrá varios aceptables para el establishment y electoralmente viables.