En el último día de la cumbre republicana organizada por Mitt Romney en las montañas de Utah, uno de los invitados, el candidato presidencial Lindsey Graham salió a practicar el tiro al plato con un grupo de donantes y recaudadores de fondos - entre ellos, Jon Lubert, fundador de JL Square Group, y Leonard Harlan, fundador de Castle Harlan - y personalidades de los medios de comunicación - entre ellos, la periodista demócrata Katie Couric.
"Darme un arma a las 6 de la mañana no es una buena idea," había advertido Graham la noche anterior.
"No dispararse en el pie es el primer objetivo en el tiro al plato y el primer objetivo en la política," bromeó el senador por Carolina del Sur poco antes de empezar la aventura.
"Si Lindsey Graham gana, probablemente será el Presidente más citable de la historia moderna y eso sería fabuloso," escribió en Twitter Stuart Stevens, el que fuera estratega electoral de Mitt Romney en 2012.
Graham desplegó todo su encanto sureño con los donantes, contando chistes malos entre disparo y disparo. Al final de la jornada, el candidato declaró que consiguió "conquistar a algunos inversores" para su campaña.
Otro de los presidenciables republicanos presentes en el retiro de Utah, el Senador Marco Rubio prefirió jugar a una modalidad de fútbol americano de cancha reducida con algunos recaudadores y ex asesores de Romney.
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| (Foto: @AlexConant) |
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