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| Hillary Clitnon en una 'house party' en Glen, New Hampshire. (Foto: @HarrellKirstein) |
En un evento en casa de unos partidarios en Glen, un pueblecito perdido de las Montañas Blancas del norte de New Hampshire, Hillary Clinton (D) habló de defender y mejorar el Obamacare, de abordar el problema de la deuda estudiantil, de la importancia que el próximo Presidente puede tener en la configuración del Tribunal Supremo para las próximas décadas, y de política exterior.
EEUU tiene que ser "mucho más inteligente" a la hora de tratar con el Presidente de Rusia Vladimir Putin y sus ambiciones. "No es un hombre fácil, pero no creo que haya ninguna alternativa aparte del compromiso constante," dijo la candidata (ver vídeo).
Apoyó las negociaciones nucleares con Irán, pero guardando cierta distancia. "Espero un acuerdo sólido y verificable que ponga techo a las ambiciones nucleares de Irán," dijo. "Aunque incluso si tenemos éxito, la agresividad de Irán no terminará," añadió subrayando sobre todo que los iraníes seguirán siendo una amenaza para Israel.
Pasó las culpas a los republicanos, indicando que Irán había redoblado su capacidad nuclear durante la Presidencia de George W. Bush. "La respuesta diplomática de la administración Bush fue algo tímida," dijo Hillary.
Cuando Obama llegó a la Presidencia con ella como secretaria de Estado, "heredamos un programa iraní de armas nucleares y tuvimos que resolver qué íbamos a hacer con ello."
Todo ello lo ha dicho matizando siempre, por si acaso, que el acuerdo que está buscando Obama no es el remedio a todos los problemas. Si el acuerdo resulta ser una maravilla, ella dirá 'Yo lo apoyé'; y si termina siendo un desastre para los intereses de EEUU, ella dirá 'Ya os lo dije.'
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