El evento aspira a ser para la izquierda algo así a lo que la CPAC es para la derecha, pero el ala gobernante del Partido Demócrata no termina de darle el trato que busca. Un año más, Hillary Clinton rechazó la invitación al evento y, por una vez, acertó.
¿Vale la pena asistir a Netroots? Visto lo visto ayer, no.
Martin O'Malley y Bernie Sanders asistieron con toda su buena voluntad pero se vieron atrapados en medio del caos que sacude a las bases demócratas, divididas entre los blancos progresistas que quieren hablar de la desigualdad de rentas y los grupos de afroamericanos militantes que quieren convertir el conflicto racial en la prioridad política de los demócratas.
O'Malley fue el peor parado mientras respondía a las preguntas del público (ver vídeo). Activistas negros empezaron a lanzarle preguntas hostiles como "¿Qué está haciendo para parar los asesinatos de hombres negros? ¿Las vidas de los negros cuentan para usted?"
O'Malley respondió con buenas palabras y un repaso a las medidas que puso en marcha durante su mandato como alcalde de Baltimore para acabar con la violencia y el abuso de las drogas.
"Las vidas de los negros importan, las vidas de los blancos importan, todas las vidas importan," dijo el ex gobernador de Maryland sin ser consciente del follón que se armaría por esa última afirmación. Fue abucheado y abandonó el escenario saludando.
El movimiento Black Lives Matter (Las vidas de los negros importan) lo interpretó como lo interpreta todo: como una frase racista.
Horas después, O'Malley se vio obligado a emitir un comunicado lamentando haber dicho que "todas las vidas importan."
"Fue un error por mi parte y no quería ser irrespetuoso. No tenía la intención de ser insensible en ningún sentido con las comunidades y no entendí la tremenda pasión, compromiso, sensibilidad y profundidad de sentimientos que todos nosotros deberíamos atribuir a este asunto."
TREMENDO.
Martin O'Malley has apologized for using the phrase, "All lives matter" while speaking to liberal activists at #NN15. pic.twitter.com/0F4GxtgKXh
— Chris Moody (@moody) July 18, 2015
Sanders subió al estrado en medio del jaleo (ver vídeo). Llamó a una revolución política y recordó que lleva cinco décadas luchando a favor de los derechos civiles, pero tampoco se libró de los abucheos. ¡Abuchearon a Bernie!
"¿Qué estamos haciendo aquí?," le preguntó Sanders al moderador, que era incapaz de controlar la situación.
La escena pone de manifiesto la radicalización que han sufrido las bases demócratas en los últimos ocho años - y en especial el crispamiento de los negros. En 2007 casi todos los presidenciables demócratas, incluidos Barack Obama y Hillary Clinton, pasaron por la conferencia de Netroots y no tuvieron ningún problema.
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