domingo, 11 de enero de 2015

Romney dedicó el sábado a hacer llamadas; se avecina una astronómica batalla entre Romney y Bush



David Chalian, de CNN, nos descubre en Twitter que Mitt Romney estuvo ayer llamando a actores principales del Partido Republicano para hacerles saber que está inclinado a montar una tercera candidatura presidencial.

"Una fuente de alto rango del Partido Republicano me dice que Romney le llamó y le habló hoy durante 10-15 minutos para decirle que es probable que se presente," escribió Chalian ayer. "Romney le dijo a la fuente que Ann [su mujer] le dijo, "Si quieres ser Presidente, hay una única manera de hacerlo y esa es presentarse,"" añadió.

Philip Rucker y Robert Costa cuentan en The Washington Post que Romney fue muy claro y directo en su reunión del viernes con 30 donantes. "Quiero ser Presidente," les dijo.

La principal razón del cambio de postura de Romney es que cree que Jeb Bush no puede ganar las elecciones generales por la carga de su apellido y piensa que él es el único que puede evitar que Jeb salga nominado de las primarias republicanas, comentan Maggie Haberman, Tarini Parti y Ben White en POLITICO.

Chris Cillizza (The Fix) se muestra más escéptico con que Romney termine presentándose y cree que el ex gobernador de Massachusetts, sencillamente, "no puede quitarse la idea [de ser Presidente] de su cabeza y de su corazón y por eso quiere ganar algo de tiempo para tomar la decisión con su propio calendario." A una parte de él, "todavía le gustaría ser Presidente y no quiere que alguien más - de nombre Jeb Bush - le excluya de esa posibilidad." Y en ese sentido - lo que sería hacer un Humphrey '76 o, llegados al extremo, un Humphrey '72 -, su actuación del viernes es una "misión cumplida" porque en las próximas semanas o meses, "muchos de esos hombres y mujeres adinerados esperarán a ver qué hace Romney antes de hacer nada."

La mayoría de las reacciones que han seguido al gesto de Mitt se detienen en el morbo que produce esa hipotética colisión entre dos transatlánticos como Romney - quien recaudó casi 1,000 millones de dólares en 2012 y se ejercitó en casi 25 debates televisados - y Bush - quien puede proponerse recaudar 100 millones en solo tres meses - que comparten un mismo perfil político - pragmáticos de centro-derecha - y los mismos antecedentes profesionales - ex gobernadores y hombres de negocios.

"El Gobernador Bush respeta al Gobernador Romney," declaró ayer la portavoz de Bush, Kristy Campbell, a The Washington Post"Su proceso de seguir adelante no se verá impactado por la decisión del Gobernador Romney de explorar una candidatura y asumo que es igual en el otro lado."

"Mitt tiene un gran respeto por la capacidad y la integridad de Jeb, y han trabajado juntos muchas veces a lo largo de los años para promover los principios conservadores," declaró Beth Myers, una de las asesoras más cercanas a Romney. "Al final, sea cual sea la decisión que tome Mitt sobre si presentarse a Presidente, estoy 100 por ciento segura de que seguirá valorando y manteniendo su amistad con Jeb," dijo.

Es verdad que hasta ahora ha habido siempre buen rollo entre los Bush y los Romney. Una prueba de ello la tuvimos en 2007, cuando los Bush pusieron la Biblioteca Presidencial George H. W. Bush a disposición de Romney, cuando solo era uno más de muchos candidatos a la nominación republicana, para que pronunciara allí un discurso sobre política exterior y otro para explicar su fe mormona.

No puede decirse lo mismo, sin embargo, de algunos de los asesores electorales que los rodean. Sí, han compartido colaboradores que mantienen buenas relaciones con los dos equipos; Sally Bradshaw, Al Cardenas y Ann Herberger, todos confidentes de Jeb, trabajaron para Romney en 2008 o 2012. Pero hay otros con cuentas pendientes.

Es el caso de Stuart Stevens, el jefe de la campaña de Romney en 2012, y Mike Muprhy, el principal estratega de Jeb Bush. La rivalidad entre Stevens y Murphy se remonta a principios de los años 90, cuando los dos lucharon por ser quien llevase la campaña de una estrella emergente de la política de Missouri - Bill Webster - que muchos veían como un futuro candidato presidencial.

Además, cuentan Philip Rucker y Robert Costa en el Post que los más veteranos del equipo de Jeb Bush "no han olvidado el papel de Stevens en la campaña de Bush a gobernador en 1994, que se convirtió en el punto más bajo de Bush políticamente. Stevens asesoraba a uno de los principales rivales de Bush, Jim Smith, quien pagó un agresivo ataque con anuncios de televisión contra Bush sobre su experiencia en los negocios y su carácter. "Esto inicia la destrucción de Jeb Bush," declaró Stevens a The New York Times cuando empezaron los anuncios. Bush ganó la primaria, pero no ganó el puesto de gobernador hasta cuatro años más tarde."

Tampoco olvidan los colaboradores de Romney que "Bush estuvo lento a la hora de apoyar a Romney en 2012. En vísperas de la primaria de Florida, con Romney luchando por repeler una subida de Newt Gingrich, Bush se mantuvo al margen cuando el equipo de Romney pensaba que él podría marcar la diferencia. Romney llamó, escribió emails y se encontró en privado con Bush para tratar de ganárselo, pero no pudo ser convencido."

Todo eso puede terminar siendo el caldo de cultivo de un futuro enfrentamiento.

"Estamos viendo los primeros disparos de la guerra entre el clan Romney y el clan Bush," dice Alex Castellanos, el consultor mediático que ha trabajado para los dos en el pasado y que parece disfrutar más que un gorrino en una charca analizando el choque de trenes que se vislumbra. "Ambos aportan a la batalla clubs de fans increíblemente poderosos así como también heridas que tienen que curar. ¿Cuán desagradable podría ponerse? Solo estás compitiendo por liderar el mundo libre," comenta Castellanos.

"Una competición Romney-Bush podría terminar siendo más sucia que una de Jeb contra alguien como Ted Cruz o Rand Paul," opina Bill Kristol, editor del Weekly Standard. "Una competición Cruz-Bush es mucho más honesta e ideológica. Una competición Romney-Bush sería más personal, sobre a quién le toca [ser el nominado] y quién se lo merece."

"La conexión Bush es una fuerza centrífuga y se está nutriendo de toda una generación de servidores públicos y políticos," dice el ex Gobernador de Utah y ex candidato presidencial Jon Huntsman, quien parece simpatizar más con Bush que con Romney.

Los políticos republicanos de los estados estratégicos de las primarias y con conexiones con los dos posibles candidatos ya están sintiendo cierta angustia ante la complicada elección que tendrán que hacer.

"La abundancia de grandes candidatos en desarrollo en el lado republicano me está complicando mucho la vida porque voy a tener que elegir entre amigos," comenta el veterano ex Gobernador de New Hampshire John Sununu, que fue uno de los portavoces más utilizados por Romney en 2012 pero que tiene una larga trayectoria vinculada a la familia Bush. "Es como una compota de manzana ahora mismo," dice Sununu. "Intentemos no coger la compota de manzana y apartémosla al otro lado del plato."

10 comentarios:

  1. Creo que la entrada de Romney en la carrera es buena para el Partido Republicano. Yo soy partidario de un debate de ideas en el que sin duda va a salir reforzado el Partido. Todos hablamos en 2008 de que la pugna entre Obama y Clinton terminaría en luchas internas en el Partido Demócrata y fue todo lo contrario.
    Dicho esto la pugna Romney y Bush puede beneficiar a otros candidatos entre los que se encuentras Chris Christie pero fundamentalmente Scottt Walker. Por favor que la gente tome más en consideración al Gobernador Walker de lo que lo está haciendo ahora.

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  2. He estado ojeando los medios de Wisconsin y si que dan por hecho que Walker se presentará a la Presidencia en 2016. No se mucho de él. Lo unico relevante a nivel nacional es que ha sido reelegido como Gobernador de Wisconsin en un estado abiertamente liberal imponiéndose a una campaña en su contra por parte de sindicatos y demás sectores de la izquierda. Tengo un amigo en Madison que dice que estamos ante una figura nacional de primer orden pero no tengo datos para asegurar que estamos ante el próximo candidato GOP.
    Yo estoy más a la espera de noticias de Christie y cuando va anunciar si se presenta a la Presidencia.
    Marco Rubio comienza hoy en Nueva York su gira de presentación de si libro "American Dreams".
    El 24-Enero comienza el Iowa Freedom Summit y ahí comenzaremos a ver las dististas posiciones y movimientos de los candidatos.
    Sobre la "guerra" Romney-Jeb coincido con el primer post Anónimo en que a "río revuelto ganancia de pescadores". Estamos en un escenario ideal para que un tercero pueda hacerse con la nominación pero como vengo diciendo quedan dos años para la elección y dos años en política es una eternidad.
    Un saludo para todos
    CMartin

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  3. Coincido con los dos comentaristas anteriores en que el choque de trenes del establishment puede abrir las puertas a un tercero, pero el beneficiario no sería Christie, puesto que compite con Bush y Romney por el mismo segmento del electorado republicano (moderados pro-negocios) y por los mismos donantes y asesores.

    Al contrario, si se multiplican los candidatos moderados, el beneficiario puede ser un candidato conservador sólido. Por credenciales, conocimiento público y carisma, el más adecuado para pescar en río revuelto sería Huckabee. Si gana en Iowa y se convierte en el líder claro de los conservadores, dejando a un lado a Cruz, Santorum o Carson, perfectamente podría adelantar por la derecha a los tres mastodontes moderados.

    Recordemos que si Romney ganó la nominación en 2012 fue en buena medida porque no compitió contra ningún otro moderado con opciones serias, mientras que los conservadores dividieron sus opciones entre Perry, Bachman, Santorum, Gingrich... Si cambia el escenario y el establishment se divide, ningún moderado podrá recaudar tanto como Romney y su segmento electoral no tendrá la fuerza que le daba en 2012 la existencia de un claro caballo ganador.

    Dicho esto, creo que Romney se comería a Bush en caso de choque de trenes. Los poderosos priman la elegibilidad, y Jeb jamás ganaría unas presidenciales.

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    1. Estimado Pedrito
      Coincido contigo en que si hay choque de trenes entre candidatos moderados, llámese Romnet, Bush y Christie, sería la hora de un corservador y ahí sin duda Rubio ganaría muchísimos puntos. Yo si que soy de los que creo que Marco Rubio va a competir por la Presidencia. ¿Que puntos a favor veo en el Senador Rubio? Mayor captación de fondos para una campaña que sus contrincantes conservadores, llámese Bobby Jinda, Huckebee o Santorum, Ahí también sobresaldría Scott Walker pero creo que Marco Rubio, en capacidad de organización, está muy por encima del resto y a la altura de Christie, Romney o Jeb.
      Coincido con Pedrito en que Jeb no ganaría unas presidenciales de ahí que sinceramente creo que apenas tiene opciones por muchos que digan la prensa liberal (MSNBC, CNN, Politico and company).
      CMartin

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  4. No estoy de acuerdo en que Jeb Bush no sea elegible. Un candidato que asegure los estados de Romney + Florida parte con 235 votos electorales. Está a solo 3 estados de ganar la Presidencia y con cientos de millones de dólares para ganar esos 3 estados. Es un punto de partido que muchos quisieran. Luego igual resulta que pierde estados ganados por Romney, todo es posible, aunque improbable. Por no hablar de que un republicanoque sea capaz de mantener los porcentajes del voto blanco de Romney y crecer en el voto hispano es de por sí elegible. El apellido es un lastre, sí, aunque también depende de lo que trate la campaña. Si se habla de terrorismo como esta semana, si se habla de educación...

    Es cierto que un candidato insurgente podría aprovecharse de una división de votos moderados entre Romney, Bush y Christie. Pero la misma división existe en el ala más conservadora del partido: un Mike Huckabee más fuerte que en 2008, un Santorum más famoso que en 2012, Ben Carson que en diciembre apareció en la lista de los americanos más admirados, Ted Cruz que es ya una estrella conservadora, Rick Perry con su experiencia de hacer frente a la inmigración ilegal, Bobby Jindal, otros.

    Todo depende de lo que busquen los votantes republcianos.

    Si quieren a un candidato que pueda decir "ya os lo dije, yo tenía razón" sobre muchos asuntos, tienen a Romney.

    Si quieren alguien que mantenga el voto blanco y suba considerablemente en el voto hispano, Jeb Bush y Marco Rubio.

    Si creen que lo que necesitan es alguien que gane las elecciones con la fuerza de su personalidad y su carisma, Chris Christie o Mike Huckabee.

    Si quieren alguien que alteré totalmente la tradicional coalición electoral republciana y forme una nueva coalición, está Rand Paul.

    Si quieren a un doctrinario, Ted Cruz.

    Si quieren a un gobernador que nos ea una celebridad y sea serio, joven y reformista, está Scott Walker.

    Etc. El problema de los republcianos es que no saben muy bien lo que buscan.

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  5. No sé si es un problema para los republicanos, pero lo cierto es que es una bendición para quienes seguimos la política americana:) Creo que vamos a tener unas primarias animadísimas, con sorpresas, choque de ideas y más de un hundimiento inesperado. Y con alguien como Anxton para contárnoslo, intuyo que nos lo vamos a pasar muy bien.

    CMartin, muy bien argumentado por tu parte respecto a las capacidades de Marco Rubio, coincido en casi todo. Sin embargo, yo tengo dudas de que Rubio juegue hoy en la categoría de los conservadores. Sus posiciones en materia migratoria y sus posicionamientos en el Senado le han ido alejando de los movimientos sociales conservadores y, al tiempo, lo han aproximado al establishment. Precisamente por eso creo que no competirá: en su jardín hay ya demasiada gente.

    Antxon, no creo que Jeb Bush sea capaz no ya de ganar, sino de ser competitivo en unas presidenciales. ¿Mantener los estados de Romney? Yo creo que ni de coña. Es un candidato mucho más débil que el Romney de 2012. En imagen pública, en experiencia reciente (lleva años lejos de la política) y en flancos atacables por su pasado reciente en los negocios. Francamente, creo que elegir a Jeb sería abrirle las puertas a Hillary. Por supuesto, me puedo equivocar, pero no lo veo.

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  6. Eso sí, nos vamos a divertir seguro :) Y, efectivamente, bien podemos encontrarnos en el Supermartes con invitados inesperados, que todo desemboque en un Christie vs. Huckabee o en un Rubio vs. Paul. Cuando se presentó Huntsman en 2011 parecía que sería la hostia (en cierta forma se parecía a lo de ahora de Jeb, anunciando sus pasos por Twitter y Facebook, buena reacción de la prensa, etc.), después Perry con sus tremendas cifras recaudatorias... anda que no gastamos horas aquellos meses de agosto y septiembre de 2011 hablando de la batalla galáctica Romney-Perry que se avecinaba xD

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  7. Y no te olvides de Herman Cain, que tuvo su minuto de gloria como insurgente exótico de la mano de su 9-9-9... hasta que pasó lo que pasó xD

    Yo intuyo que el bluff de este año va a ser Jeb Bush. No lo compararía con Huntsman ni con Perry, sino más bien el Giuliani de 2008. Alguien que sobre el papel tiene buenas credenciales, pero tiene demasiadas debilidades y es incapaz de conectar con la masa conservadora. Pero veremos, es posible que me equivoque.

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  8. Es posible que el tan anticipado Clinton vs. Bush de 2016 sea como el Clinton vs. Giuliani que todos esperaban en 2008. Pero a mí me cuesta mucho imaginar que Jeb Bush no terminé siendo un candidato competitivo. Ahora mismo es el favorito a la nominación republicana, por nombre, recursos, apoyos, y también por algunas necesidades electorales del partido (el voto hispano; tener un candidato capaz de dar entrevistas en castellano en medios hispanos ¡y capaz de seguir este blog! no es una tontería. Igual lee vuestras opiniones ;) ).

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  9. Querido Jeb, si nos estás leyendo te mando un abrazo. No te tomes mal mis opiniones, que van sin acritud. Y si quieres tener alguna opción, ficha a Antxon como asesor de tu campaña;)

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