Scott Walker promete que limitará el poder de los sindicatos federales

Scott Walker (R) recurrió ayer al punto fuerte de su trayectoria para intentar recuperar el impulso perdido en la carrera presidencial republicana: restricciones a los sindicatos.

En una fábrica de Las Vegas, Nevada, el gobernador de Wisconsin presentó un plan para destripar a los sindicatos a nivel nacional.

Walker propone: negar el derecho a la negociación colectiva a los funcionarios federales, incluidos los empelados del FBI y de la patrulla fronteriza; eliminar la Junta Nacional de Relaciones Sindicales; promover una Ley de Derecho al Trabajo a nivel nacional; terminar con la capacidad de los sindicatos de requerir a los trabajadores públicos de algunos estados que paguen cuotas sindicales con las que después financian las campañas electorales de los demócratas; obligar a los sindicatos a publicar en Internet las compensaciones a los oficiales del sindicato y los gastos del fondo fiduciario administrado por el sindicato; y establecer protecciones para los soplones.

"Debemos enfrentarnos a los jefes sindicales del gobierno todopoderoso en Washington, igual que me enfrenté a ellos en Wisconsin," dijo Walker. "Los empleados federales deberían trabajar para los contribuyentes, y no al revés."