Hillary Clinton ha arrancado en Pittsburgh, en el oeste de Pennsylvania, la que será una de las jornadas más intensas de su vida como candidata presidencial. La ex secretaria de Estado, a 36 horas de la posibilidad de culminar una ambición de más de una década, hará en principio cuatro eventos en tres estados indecisos: dos en Pennsylvania, uno en Michigan y uno en Carolina del Norte. Por mucho que diga su campaña, dudo que en su plan original estuviera pasar la mayor parte de la víspera electoral en dos estados industriales del Medio Oeste que no votan republicano en unas presidenciales desde 1988.
No muy lejos de donde Trump movilizó a 12,000 personas anoche, unas 2,500 personas han dado la bienvenida a Clinton este mediodía en los exteriores de la Catedral del Conocimiento, uno de los símbolos arquitectónicos de Pittsburgh. "¡Te queremos!," le han gritado algunos de sus seguidores. "Yo también os quiero a todos," les ha respondido Clinton, aparentemente más relajada que en los últimos días.
"Tenemos que curar a este país," ha dicho Clinton en una sección del Paseo Bigelow.
"Tenemos que elevarnos por encima de toda esta retórica llena de odio," ha dicho sobre su rival republicano. "Yo quiero ser la Presidenta de todos los americanos, no solo de algunos."
"Estoy aquí para pediros que votéis por vosotros, que votéis por vuestras familias, que votéis por vuestros futuros, que votéis por los asuntos que os importan porque están en la papeleta," ha dicho.
"Hay miedo, incluso cabreo en nuestro país," ha reconocido. "Pero no tenemos que aceptar una visión oscura y divisiva de América. Podéis votar por una América optimista, inclusiva y generosa."
La candidata ha pedido a sus simpatizantes que voten a pesar de cualquier adversidad. "Las elecciones tienen consecuencuas para todo lo que nos importa," ha dicho. "Si las colas son largas mañana, por favor, esperad."
Mitin completo en Pittsburgh
Clinton, a los pies de la Catedral del Conocimiento de Pittsburgh
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