Antes de adentrarse hoy en la encantadora Nueva Inglaterra, Donald Trump hizo anoche un segundo mitin en Carolina del Norte, cuyos 15 votos electorales le son virtualmente imprescindibles para ganar la Presidencia, salvo que compense una derrota allí con una victoria en alguno de los grandes estados industriales del Medio Oeste que han votado demócrata desde 1992 (Pennsylvania, Michigan, Wisconsin).
En Charlotte, un bastión demócrata dentro de la indecisa Carolina del Norte, el candidato presidencial republicano se presentó como "una víctima de una de las grandes campañas políticas difamatorias de la historia de nuestro país." "El establishment político está intentando pararnos porque saben que nosotros vamos a parar la corrupción en el gobierno. Nadie es más corrupto que la Fraudulenta Hillary," dijo.
Las acusaciones de mala conducta con las mujeres, urdidas por Hillary Clinton y uno de sus amos encargados, Carlos Slim, según Trump, son "100 por cien falsas" y no hay "ni pizca de evidencias." "Cuando los medios hacen lo que están haciendo ahora, están amañando el sistema, tíos," dijo. "Son gente muy deshonesta."
Las mujes en realidad lo adoran y él siente esa adoración incontenible. "Me gustan esos carteles, 'Mujeres por Trump,'" dijo señalando los carteles de color rosa que había entre el público. "Pienso que voy a hacerlo bien con las mujeres."
Prometió que subirá los salarios, bajará los impuestos y detendrá la llegada de refugiados que sean potencialmente peligrosos. Y, por supuesto, habló de sus dos promesas estrella.
Por un lado, rechazar los acuerdos comerciales injustos para EEUU, incluida la renegociación o derogación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (NAFTA), y penalizar a las compañías que trasladen su producción fuera del país.
¿Cómo piensa hacerlo? "Tienes que ir a verlos, tienes que persuadirlos, tienes que ser amable," dijo. "Y si eso no funciona, los reventaremos a impuestos cuando traigan sus productos a EEUU."
La otra gran promesa Trumpiana: el muro en la frontera con México con una "puerta grande y preciosa" abierta solo para los inmigrantes que entren legalmente.
"Votad a Trump," pidió el candidato a los norcarolineses. "Nosotros vamos a arreglarlo."
Momentazo: Trump desmantela el teleprompter. "Estos teleprompters no han estado funcionando en los últimos 20 minutos," dijo. "Y en realidad me gusta más mi discurso sin teleprompters."
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